El tiempo de prueba no continuará por mucho tiempo. Ahora Dios está retirando sus manos refrenadoras de la tierra. Utilizando al Espíritu Santo como su agente, por mucho tiempo ha estado instando a los mortales; sin embargo, no han prestado atención a su llamado. Por intermedio de sus juicios, ahora le está hablando a su pueblo y al mundo. RP/ 161.
jueves, 31 de agosto de 2023
09. SER SEMEJANTES A JESÚS EN LA TESTIFICACIÓN… (EGW) AUDIO. Comuniquemos a otros las benditas verdades de su Palabra, y obedeciendo las palabras de Cristo, permanezcamos en su amor. Él nos insta a que por el amor que le tenemos guardemos sus mandamientos. Lo hace, no para impulsarnos a hacer cosas imposibles, sino porque sabe lo que significa guardar los mandamientos de su Padre. Quiere que cada alma que escuche su invitación, invite a otros a escucharla y a recibir sus preciosos dones, porque sabe que al guardar los mandamientos de Dios no caeremos en servil esclavitud, sino que seremos hechos libres por medio de la sangre de Jesucristo. “…En guardarlos hay grande galardón”. Salmos 19:11. Díganlo a otros con la pluma y la voz, con piedad, humildad y amor, representando el carácter de Cristo. “Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”. Apocalipsis 22:17. Alza tus Ojos, 342.
09. REFLEJEMOS A JESÚS “PARA SU SEGUNDA VENIDA” (EGW) AUDIO. Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.Tito2:13,14. Estos Versículos Enseñan una lección muy diferente de la que se presenta en las palabras de muchos que profesan creer el Evangelio. Se Nos Exhorta a vivir sobria, justa y piadosamente en este mundo actual, y a aguardar la gloriosa aparición del gran Dios y Salvador Jesucristo. Algunos han objetado mi obra, porque enseño que es nuestro deber aguardar la aparición personal de Cristo en las nubes de los cielos. Han dicho: "Cuando escuchamos a la Sra. White referirse a la venida de Cristo parecería que el día del Señor ya está sobre nosotros. Ella ha estado predicando sobre el mismo tema durante los últimos cuarenta años, y el Señor todavía no ha venido". Idéntica objeción podría levantarse contra las palabras de Cristo mismo. Él dijo por boca de su discípulo amado: "Ciertamente vengo en breve", y Juan responde: "Amén; sí, ven, Señor Jesús"(Apoc.22:20,21).RJ 250
miércoles, 30 de agosto de 2023
14. “LA ETERNA RECOMPENSA DEL TRABAJO POR OTROS”
Mas
cuando hagas banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos;
y serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero te será
recompensado en la resurrección de los justos. (Lucas 14:13,14).
Es la recompensa
de los obreros de Cristo entrar en su gozo. Ese gozo, que Cristo
mismo espera con ansias, se presenta en
el pedido que hace a su
Padre: "Aquellos que me has
dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo" (Juan
17:24).
Al ascender después de
su resurrección, los ángeles estaban
esperando para dar la bienvenida a Jesús. La hueste
celestial anhelaba saludar otra vez a su Comandante, devuelto a ellos de la casa de la muerte. Ansiosamente lo rodearon al entrar por los portales del
cielo.
Pero Él les
pidió que se apartaran. Su corazón acompañaba al grupo solitario y afligido de
discípulos que había dejado en el Monte de los Olivos. Todavía está con sus hijos que luchan sobre la
tierra, que enfrentan todavía una
batalla con el destructor. "Padre -dice- ...quiero que donde yo estoy,
también ellos estén conmigo".
Los
redimidos por Cristo son sus joyas, su tesoro precioso y especial. "Como
piedras de diademas serán" (Zacarías 9:16), "las riquezas de la
gloria de su herencia en los santos" (Efesios 1:18). En ellos "verá
el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho" (Isaías 53:11).
¿Y no se
regocijarán también sus obreros cuando vean el fruto de sus labores?...
Cada impulso del
Espíritu Santo que conduce a los hombres a la bondad y a Dios se registra en
los libros del cielo, y en el día de Dios, cada uno de los que se entregaron
como instrumentos para la obra del Espíritu Santo podrá ver lo que su vida ha
producido.
Maravillosa
será la revelación cuando se pueda ver la acción de la santa influencia con sus
preciosos resultados. ¡Cuánta será la gratitud de las almas que nos saldrán al
encuentro en las cortes celestiales cuando comprendan el interés y la amante
simpatía que los ha conducido a la salvación!
Toda la
alabanza, el honor y la gloria serán dados a Dios y al Cordero por nuestra
redención, pero no disminuirá la gloria de Dios el expresar la gratitud a los
instrumentos que El empleó en la salvación de las almas que estaban a punto de
perecer.
Los redimidos se encontrarán con aquellos cuya atención dirigieron al Salvador ensalzado, y los reconocerán. ¡Qué benditas conversaciones tendrán con esas almas! "Yo era un pecador -se dirá-...y tú viniste a mí, llamaste mi atención al precioso Salvador como mi única esperanza. Y yo creí en El".... ¡Qué gozo habrá cuando estos redimidos se encuentren y saluden a los que tuvieron una carga por ellos!
Review and Herald, 5 de enero de 1905. RJ249/EGW/MHP 250
martes, 29 de agosto de 2023
13. “EL GOZO DEL SERVICIO POR CRISTO”
Pero
esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que
siembra generosamente, generosamente también segará. (2 Corintios 9:6).
Ministerio
significa servicio, y a este ministerio somos llamados. Deshonra a Dios el que alguno escoja una vida de satisfacción propia.
Mis hermanos y hermanas, ¿comprenden
ustedes que cada año miles de almas están pereciendo, muriendo en sus pecados porque la
luz de la verdad no alumbró su senda?...
Hay una gran
obra que hacer en nuestro mundo. Los hombres y las mujeres han de ser
convertidos, no por el don de
lenguas ni por la operación de milagros, sino por la
predicación de Cristo crucificado.
¿Por qué demorar
el esfuerzo por mejorar el mundo? ¿Por qué esperar que se haga algo
maravilloso, que se provea alguna estructura costosa?
Por humilde que sea su
esfera, por modesto que sea su
trabajo, si usted trabaja en armonía
con las enseñanzas del Salvador, Él se revelará por
intermedio de usted, y su influencia atraerá las
almas a Él.
Él honrará a los
mansos y humildes, los que sinceramente buscan servirle. En todo lo que hacemos, sea en el
taller, en la chacra o en la oficina, hemos de
esforzarnos por ganar almas.
Hemos de sembrar
junto a todas las aguas, manteniendo nuestra alma en el amor de Dios, y
trabajando mientras es de día, usando los medios confiados a nosotros en el
servicio al Maestro.
No importa
qué encuentren nuestras manos para hacer, trabajando mientras es de día, hemos
de hacerlo con alegría; cualquier sacrificio que seamos llamados a hacer, hemos
de hacerlo alegremente. Al sembrar junto a todas las aguas, descubriremos la
verdad de las palabras: "El que siembra generosamente, generosamente
también segará".
Debemos todo a
la gracia, a la gracia soberana. La gracia decretó nuestra redención, nuestra
regeneración y nuestra adopción para ser herederos con Cristo Jesús. Revelemos
esta gracia a otros.
El Salvador toma a los que encuentra que serán
moldeados y los usa para la
gloria de su propio nombre. Usa materiales que otros
dejarían de lado, y trabaja en todos los que han de entregarse a Él.
Se goza en tomar
material aparentemente inservible, aquellos que Satanás
ha degradado y por medio de los
cuales ha trabajado, y los somete a su
gracia. Se goza en
librarlos del sufrimiento, y de la ira que está a
punto de caer sobre los desobedientes.
Hace de sus hijos agentes para realizar esta obra, y en su éxito, aun en esta vida, encuentran una preciosa recompensa. Pero ¿qué es esto comparado con el gozo que tendrán en el gran día de la revelación final?
Review and Herald, 5
de enero de 1905. RJ248/EGW/MHP 249
miércoles, 16 de agosto de 2023
12. “CUMPLIR LA VOLUNTAD DE DIOS AL ADVERTIR A LOS PERDIDOS”
No sirviendo al
ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo,
de corazón haciendo la voluntad de Dios; sirviendo de buena voluntad, como al
Señor y no a los hombres, (Efesios 6:6,7).
Anoche se presentó una escena delante de mí. Tal vez nunca me sienta libre de revelarla
completamente, pero revelaré una parte de ella.
Me parecía ver una inmensa bola de fuego que caía sobre el mundo, y que aplastaba grandes mansiones.
De lugar en lugar se elevaba el clamor: "¡El Señor ha venido! ¡El Señor ha venido!" Muchos no estaban preparados para
recibirlo, pero unos pocos decían "¡Alabado sea Dios!"
"¿Por qué están alabando a Dios?" les preguntaban los que sentían que la destrucción venía sobre ellos. "Porque ahora vemos lo que hemos estado esperando".
"Sí ustedes creían que estas cosas vendrían, ¿por
qué no nos lo dijeron?" fue la terrible respuesta que
recibieron "No sabíamos nada de esto. ¿Por qué nos dejaron en la ignorancia?
Todo el tiempo nos veían; ¿por qué no vinieron a visitarnos y a hablarnos del juicio que había de
venir, y que debíamos servir a Dios para no perecer? ¡Ahora estamos perdidos!"
Cada miembro de la iglesia debe educar su intelecto para que pueda tener una clara comprensión de la voluntad de Dios con respecto a él, cada uno ha de educar su voz para poder comunicar el conocimiento de las Escrituras a los que las ignoran. Que Dios nos ayude a
levantarnos, como Daniel, para recibir
nuestra heredad durante los días de
preparación que nos quedan.
Padres, enseñen a sus hijos acerca de las cosas que ocurrirán sobre la tierra, y condúzcanlos a prepararse para encontrar a su Señor en paz. Obtengan un conocimiento de las Escrituras. No llenen su cabeza con novelas insensatas.
Los que deseen comprender la verdad tan claramente que puedan enseñarla
inteligentemente a otros necesitarán poder nervioso cerebral. No nos sobra este
poder cerebral.
Nunca podemos permitirnos el lujo de usar tabaco
o licores alcohólicos o cualquier otra sustancia dañina, pues debemos
esforzarnos por mantener la claridad de nuestra mente para la obra de ganar almas.
El Señor se agrada con los que manifiestan fervor en su servicio. Es el privilegio de todos cultivar fielmente todo poder dado por Dios.
En este gozoso día... los rescatados exclamarán:
"¡Digno, digno es el Cordero que fue inmolado, y vive, Conquistador triunfante!".
Qué gozo sentirá entonces el obrero, al acercarse a aquellos a quienes había hablado con temor y temblor, abriendo ante ellos las Escrituras y orando con ellos, inclinando la balanza del lado correcto... Todas las providencias de Dios quedarán en claro.
Manuscrito 102, de 1904.
RJ234/EGW/MHP 236